jueves 24 de septiembre, El Sueño del Esquimal #263.

MISS KITTIN & THE HACKER
Two
nobody's bizzness, 2009.

Los franceses Caroline Hervé (a.k.a. Miss Kittin) y Michael Amato (a.k.a. The Hacker) se conocieron a comienzos de los 90s' en una rave en su natal Grenoble, eran tiempos movidos, se había producido una apertura hacia la música techno, estilos como el electro y el house hacen sacudir cuerpos y mentes en una danza ultra-intensa que ya no parará, Miss Kittin & The Hacker estaban ahí para absorver todo esto y vomitarlo a su manera, recordar que aparte de este proyecto conjunto, ambos llevan carreras por separado muy destacadas y han sido djs' remezcladores, productores y músicos, sin duda se han convertido en un referente importante dentro de la música electrónica actual.
En 2001 editaron el sencillo " Frank Sinatra", que se convirtió en todo un 'suceso dance', el advenimiento del electroclash se concreta ese mismo año con la publicacion de "The First Album", este trabajo les da reconocimiento mundial, comienzan las giras, la fiesta interminable y las remezclas para algunos artistas de renombre como Laurent Garnier, Mark Almond, Air, Tocotronic y Nitzer Ebb.
Luego de varios años en el congelador, el proyecto se reactiva con la edición de "Two" a fines de marzo de 2009, un disco que los muestra aún intuitivos, sugerentes y muy creativos entre sus ritmos marcados y esa rara coraza de techno minimal mutado por electro-punk turbador.
La primera parte del álbum es notable, partiendo por "The Womb" y sus secuencias robóticas iniciales, muy a lo Kraftwerk, para luego apoderarse inmediatamente de la pista con ritmos quebrados y la voz de Miss Kittin que juega con el desgano y la seducción en este corte.
"1000 Dreams" es techno-pop de vieja escuela, con ese sintetizador oscuro y minimal que hace recordar a Camouflage y Depeche Mode, un tema de bellas melodías y muy dance, Miss Kittin esta vez nos lleva de regreso a los 80' con su voz, a esta altura del disco, la atmósfera del lugar se enrarece y entramos en una extraña conducta desenfrenada, la música haciendo su parte en la noche viciosa. Esto es electroclash y en todo su esplendor señores.
La placa se aleja del concepto 'radial' de su antecesor, para entrar en una carretera nocturna desafiante y peligrosa, esto se refleja en cortes como "PPPO" e "Indulgence", temas densos y asfixiantes en los que rozan el sonido industrial, lo cual se agradece.
Hasta se han atrevido en incluir una version para "Suspicius Minds" del gran Elvis Presley, por todo esto "Two" se convierte en un artefacto sugerente y placentero, un nuevo brebaje de techno-pop para los antros.

myspace.com/mkthmusic







PORT-ROYAL
Dying In Time
n5MD, 2009.

Desde Génova, Italia, la agrupacion Port-Royal siempre nos invita a pasear por espacios sonoros distintivos, desde su disco debut, "Flares" (2005), que nos hizo pensar nuevamente en space-rock y viajes celestes, luego en "Afraid To Dance" (2007) entregaron un delicado tesoro de claridad y belleza melódica, primeros lazos con sonidos electrónicos refinados, estos dos trabajos fueron editados bajo etiqueta Resonant, la primera familia.
Para esta tercera expedición, Port-Royal se introduce en el manto arcano del sello n5MD, cuna de agrupaciones nubosas como Bitcrush, Lights Out Asia, Arc Lab y SubtractiveLAD.
"Dying In Time" es una pieza de colección, un tratado de sonoridades profundas y expansivas, se siente la experimentación desde el primer momento, hay una búsqueda de espacios vastos e intensos, ondas de ruido que se desplazan como una tormenta sigilosa, desde la oscuridad más cerrada viajan hasta una luminosidad que aparece bendecida, también se dejan sentir los ritmos programados y algo bailables, todo el entramado realmente seduce y es imposible no seguir el resplandor, por eso se recomienda escuchar el disco en forma continua.
Port-Royal son Attilio Bruzzone en guitarra y voz, Emilio Pozzolini en sampler y programaciones y Ettore Di Roberto en piano, sintetizador, programaciones y voces, para este trabajo han contado con la participación especial de la japonesa Izumi Suzuki aka Linda Bjalla en vocalizaciones etéreas, las que encajan perfectas en esta bóveda celeste.
Muchas canciones para destacar en "Dying In Time", desde la que abre el camino, "Hva (failed revolutions)" una especie de agujero negro o tormeta eléctrica, que lentamente se va alejando hasta terminar en un ambiente onírico con dulces ninfas exhibiendo su magia, los trayectos son caóticos y variopintos, se sumergen y se elevan en sólo un momento, como en "Nights In Kiev", que parte con un pulso dominante, para luego decaer en un campo de texturas electrónicas diminutas, cuando estamos a punto de refugiarnos en este jardín, retorna el ritmo industrioso para ya no parar más.
Otro corte encantador es "Anna Ustinova", algo más shoegaze con Linda Bjalla en los cantos, se hace presente ese lado nostálgico que tiene Port-Royal, la inspiración y los recuerdos de países de Europa del Este, fotografías en sepia de ciudades como Varsovia y Praga, el frío y la historia de esas sociedades comunistas, que se quedaron atrapadas entre el tiempo y los sueños de libertad.
También hay un tema dedicado a la generación que va perdiendo el pelo, o sea esta generación en "Balding Generation (losing hair as we lose hope)", llamativo nombre para el primer single de este emocionante disco.

Cosmonautas del pasado dibujando nuevamente los cielos.

myspace.com/uptheroyals

ALISU
Indómita
modismo, 2009.

TONOSSEPIA
Happy Habibi
modismo, 2009.

Desde el natlabel nacional Modismo, dos estimulates muestras de 'actividad paranormal', exploradores de resonancias maquinales.


Valparaíso como telón de fondo, Jessica Campos aka Alisu es uno de los nombres destacados de la escena electrónica chilena, en el año 2000 formó el proyecto Manziping junto a Rolancho (Pueblo Nuevo), con quién graba un disco y un Ep.
Y cómo no recordar hace algunos meses atrás, cuando Alisu abrió para Alva Noto y Byetone en la Sala Ruben Darío del Centro de Extensión de la Universidad de Valparaíso, desplegando sus estructuras digitales con delicadeza y personalidad.
Siempre en la búsqueda de ambientes especiales, ahora expone en "Indómita", construcciones de cristal soportadas por luz y gala que abren la ventana hacia un mundo minimal y robótico escondido en el patio interior, en el primer corte "Voy Por Tí" nos sorprende la aparición de su voz, tras la rítmica sedante y los sonidos porteños. "Mareas" es un tema más abstracto, pero a pesar de eso, no pierde nunca ese interesante juego de texturas y ruidillos que hacen habitable este manantial helado.
Pero es en "La Primera Robotsicóloga" donde encontramos el centro vital de la música de Alisu, el arrebato y la inteligencia artificial unidos para desentrañar los reflejos lumínicos de un mundo paralelo. Encanto glacial.


Diego Vergara aka Tonossepia, también conocido como Prospegto Arkano, MC, DJ y productor musical de Colectivo Etéreo, personaje de brazos múltiples, que deja al desnudo como Tonossepia su costado electrónico más lúdico y orgánico, escuchar "Happy Habibi" es como adentrarse en una especie de cuento sonoro, con todos esos crujidos y ecos reluciendo y apareciendo pordoquier, somos inducidos por un bosque de ensueño, a ratos se vienen a la mente Prefuse 73 y la corte de Morr Music, pero acá hay indentidad y gusto particular, tiramos las etiquetas y nos concentramos en las canciones, en esos nombres imaginativos, "Mi Lado De la Cama", "Ghibli" haciendo referencia a los estudios filmográficos japoneses, "Parlante Al Curry" es folktrónica poseída por bases hip-hop y la genial "Perritos De La Selva Otra Cosa Es Con Guitarra", un racimo de luz bucólico y de ritmos quebrados que estremece por su fragilidad casi infantil.
"Happy Habibi", creatividad en las costuras y diseños cálidos que envuelven.

Se hace presente también el Señor Patricio Badaracco, reapareciendo desde Hawái.

WILLIAM BASINSKI
92982
2062, 2009

Al fin nuevo material del músico del silencio emerge a la luz. Aunque aquello de ‘nuevo material’ no es exactamente tan así. Se trata de registros extraídos de sus archivos, guardados hace casi veintisiete años, que recién este 2009 se atreve a exponer. A muchos les parecerá extraño, sin embargo, esto es algo que acostumbra a hacer. Como ejemplo están sus discos “The River” (raster-noton, 2002), con material del año 1983, o “Variations: A Movement In Chrome Primitive” (Die Stadt–Durtro, 2004), del período 1980–82.

“92982” nos retrotrae a, precisamente, el 9 de septiembre de 1982, “una fructífera mañana en el estudio”, en el 951 de la calle Jay. Basinski se encuentra experimentando con sus cintas, creando sus bellas melodías que se toman el espacio, “las ventanas están abiertas… El sonido se esparce a través de todo el centro de Brooklyn, mezclándose con los helicópteros, sirenas, humo de marihuana e incendios…”. Ahora, mayo de 2009, las mismas piezas se mezclan nuevamente. Puede ser con los ruidos de una ciudad, o del campo, o tu habitación, o simplemente el eterno ruido interior. Sea como fuere, y como dije antes, los sonidos se toman el espacio. Tal vez sea como dice él, que se confunden con lo otro. Yo mas bien creo que absorben casi todo lo que esta a su alrededor, acallan lo que estorba, o visto de otro modo, se aíslan, y aíslan al resto, consiguiendo que uno, el oyente, se enfoque solo en sus sonidos. Es extraño el efecto que la música de Basinski produce. No es solo ‘otro disco mas de ambient’. Realmente es envolvente. Tiene una materialidad que excede las simples frecuencias sonoras. Ya antes me he referido a la fisicidad de sus piezas. En cuanto a estas, las de este disco, no se distancian demasiado –más bien nada– del resto de su obra, lo que no equivale a decir falta de creatividad, sino simplemente buscar, encontrar y tener un sonido propio. Solo son cuatro tracks (de siete a veintidós minutos), y los hay unos cercanos a “The River”, como en “92982.2”, donde si se oyen, muy a lo lejos, esa mezcla real con las sirenas y helicópteros sobre Nueva York, como al piano inmóvil de “Melancholia” (2062, 2003), caso de “92982.4” –más cintas y pianos en desintegración en el inquietante “Variations For Tape And Piano” (2062, 2006)–. De hecho este track, pero en una versión mas corta, ya había sido incluido en “Variations: A Movement In Chrome Primitive”. “Esa noche en el estudio se engendró una dirección que seguiría por un tiempo. Tanto como amo este documento de esa noche, pienso que a ustedes les gustaría poner en contexto lo que vendría después”. Pues este disco, como todos los otros, forman parte de una gran visión. Es más, alguien, algún día, debiese hacer el experimento de programar todo lo publicado por Basinski, sin cortes, uno tras de otro. Les aseguro que en el resultado final no habría grietas, no podrían encontrarlas. Todo parece formar parte de un plan, un gran plan de este músico que explora el silencio, o si quieren, el silencio de un músico nadando entre sonidos acallados.






TAYLOR DEUPREE
Weather And Worn
12K, 2009

La belleza de las cosas pequeñas. “Weather And Worn” es el primer 7” que aparece en el sello norteamericano 12k, el primero de una serie de futuras publicaciones en este formato, a cargo de, y no podía ser de otra manera, su dueño: Taylor Deupree.

La idea de editar material en vinilo rondaba por la cabeza de Deupree hace ya un tiempo, y era mas o menos conocida, pero solo este año se pudo concretar. Y la manera en que surgieron fue de un modo particular, por las coincidencias que se produjeron. Como el mismo relata, “en un particularmente frío y lluvioso día de invierno, cansado y un poco abatido, me senté en mi estudio, rodeado con una pila de instrumentos pequeños, mi guitarra acústica y mi pedal de loops. Pixel, uno de mis gatos, estaba durmiendo al lado mío mientras comencé a crear un cálido colchón de drones y pequeños ruidos en un intento de calentar la habitación y mis espíritus”. Ese mismo día estaba finalizando en los detalles que harían posible la publicación de vinilos, día en que compuso lo que serían las dos caras de ese primer 7”. “Solo eche una mirada al clima fuera de la ventana y luego a una vieja pieza de vinilo aún puesta en el tornamesa desde el otoño para saber inmediatamente el título y el sentimiento de estas piezas”.

Guitarra acústica, claves, e-bow, efectos, armónica, kalimba, tambor, triángulo: pequeños objetos. “Weather”, “Worn”: pequeñas canciones. Como ya nos tiene acostumbrado, Deupree nos entrega mas canciones, en este caso dos, donde lo ínfimo, lo minúsculo, cobra un gran valor. Los detalles son el centro de este, su nuevo trabajo, más enfocado en lo orgánico. Esto marca “las primeras grabaciones que he hecho enteramente con instrumentos acústicos y un mínimo de tratamiento”. Así, y a partir de un drone, se desarrollan estas canciones, extendiéndose a partir de una misma nota, e impregnadas de un aroma natural, cálido y acogedor. Son pequeños hogares, refugios frente a la crudeza del frío. Tanto la cara A (“Weather”) como la B (“Worn”) tienen una duración de apenas cuatro minutos. Ocho minutos en total para lograr lo que siempre ha buscado: mover, emocionar, producir sensaciones. En esta ocasión, abrigar con el calor del invierno, humedecer con gotas imaginarias las ventanas que separan una habitación de su entorno natural. En caso que eso no sea suficiente, la versión digital incluye “Worn (Stil. Mix)”, inspirada en su álbum “Stil.” (12k, 2002), donde creó un loop a partir de una porción del tema y traspasó la velocidad y el pitch a 33 rpm, y lo extendió por 23 minutos. Aunque esa duración es “arbitraria… realmente podría durar por horas”. A la espera de un nuevo disco largo en solitario y en estudio –“Northern” (12k) es de hace ya tres años–, este single calma algo las ansias de oír nuevo material. “Weather And Worn”, o el triunfo de las cosas pequeñas.






JANA WINDEREN
Heated: Live In Japan
Touch, 2009

Desde aproximadamente 1993, la artista noruega Jana Winderen se ha desarrollado tanto creando como produciendo y curando trabajos artísticos, exhibiciones e instalaciones, pero no es hasta recién mediados de esta década que comienza a publicar sus sonoros, siendo el primero completamente a su nombre el 7” “Surface Runoff” (Autofact, 2008).

“Heated: Live In Japan” es el registro de una presentación en vivo, en el Super Deluxe (Tokio, Japón), presentación realizada el 28 de octubre del pasado año, y en la que empleó e improvisó sobre material grabado con micrófonos e hidrófonos en lugares como Groenlandia, Islandia y Noruega. Al norte del norte.
Lo que más claramente se puede oír a lo largo de los veintisiete minutos que dura es el agua, su desplazamiento, sea entre superficies más sólidas, o entre ella misma. Son estos sonidos naturales, así como otros, los que cubren todo el disco. De ahí su carácter acuoso y un tanto inaprensible (“Part 4”), aunque en ocasiones tiene cierto efecto ahogador (“Part 3”).

La propuesta de esta artista –o documentalista– es mostrar lo que no vemos, lo que no oímos. Hacer visible aquellos muchos otros mundos que por diversas razones no conocemos, pero que, gracias a la tecnología actual –algún buen uso tenía que tener tanto avance– podemos presenciar, en este caso su propia música. “He estado ocupada con encontrar sonidos de fuentes no vistas de sonido, como grabaciones de campos blancos. Durante los últimos dos años he estado coleccionando grabaciones hechas por hidrofonos, de ríos, riveras, playas y el océano, y más recientemente también de glaciares en Groenlandia, Islandia y Noruega. En las profundidades del océano hay invisibles pero audibles paisajes sonoros, acerca de los cuales somos muy ignorantes, aún cuando el océano cubre el 70% del planeta”. Sí, somos ignorantes, de esto y de mucho más, pero siempre habrá alguien que nos abra los ojos, en este caso los oídos –para imágenes esta “A Scene At The Sea” (Takeshi Kitano, 1991) o, un tanto más new age, “Le Grand Bleu” (Luc Besson, 1988)-. En esta ocasión se trata de Jana Winderen, quien nos traslada a los vastos terrenos del mar, y a la inmensa calma de sus movimientos ondeantes. Como decía el fotógrafo Hiroshi Sugimoto, a propósito de sus ‘Seascapes’, “cada vez que veo el mar, percibo una tranquilizante sensación de seguridad, como si visitara mi hogar ancestral”.