Dos Muchachas una vez se escaparon de la normalidad, envueltas en halo misterioso y esencias multicolores.
Brülez Ce Coeur
constellation, 2012
Entrando en la 'constelación paranormal' localizada en Montreal, Canadá, y desde el mismísimo estudio Hotel2Tango, cuna de trabajos emblemáticos de nombres como Goodspeed You! Black Emperor, Arcade Fire, Do May Say Think, Eric Chenaux, Hrsta o Land Of Kush, uno no puede desenfocarse ni perder la pista sobre la importancia que ha tenido la escudería Constellation en el sonido experimental de estas ultimas décadas, eso de dejarse llevar en la entrega de una música expansiva que no implica bordes auditivos ni creativos, al contrario, se convierte en una ventana imaginaria hacia nuevos estados y superficies de liberación.
En una manera particular Les Momies De Palerme llegan para hipnotizar con su aquelarre nocturno, contemplativo por momentos y alterante en esa curva mística que hacen notar a cada paso en su primer trabajo "Brülez Ce Coeur", ellas crearon este proyecto en el otoño de 2006, Marie Davidson y Xarah Dion, miembros del colectivo Land Of Kush, quisieron pasar del territorio orquestal hasta un espacio intimista sostenido por ambientes oscuros y vocalizaciones soñadoras, así es, porque acá el elemento onírico, espectral y mántrico (si se quiere) toman una dirección fascinante que logra cautivar desde la primera ofrenda, "Rivière Du Non-Retour" es un cadalso terminal repleto de flores que iluminan, las voces de Marie y Xarah juguetean en el paisaje deformado por sintes, ruidos y ornamentaciones escapistas que van diseñando una visión malsana, sacadas desde el centro de una gran colapso o corte divisorio, lo que vendría luego de esa gran sacudida se encarna en la música de las muchachas de Quebec, ahí se encuentra ese punto de médium que ejercen, conectando con la naturaleza muerta, la hojarasca y los presagios íntimos como en "Solis" al que entregan ese canto letalmente hermoso en una atmósfera silvestre y profunda, pequeños pasos frente al bosque de árboles gigantes en una ceremonia de ultratumba que podría encontrase cerca de lo que hace Liz Harris con Grouper por ejemplo. En esas lejanías estamos hasta que se sacan un tema de otra orilla como "Incarnation", se asoman al sol utilizando una ritmica pre-grabada y golpeadora, sin embargo las voces permanecen distantes y envueltas en un nimbo psicotrópico, el violín peregrino resplandece en este prado femenino, incandescente y misterioso como pocos. No hay señales de lugares comunes en este álbum, todo pareciera salir desde una fuente de conocimiento dual, explorativa y de sensualidad oculta. Abriendo esos abismos perceptivos se encaminan hasta "Le Cerf Invisible", suaves imágenes de inocencia que se transportan en el torbellino ruidista, el loop incesante, la cabalgata instintiva. Vienen y van desmenuzando el diseño primario, pronto lo convieten en un ritual sagrado con el tema titular del disco, oscuridad, grandiosa maestra de nuestras más profundas contradicciones, el 'soplo francés' se cuela en el mantra inmaculado formando difusas figuras danzantes y hechizeras... "Brûlez Ce Coeur". Cuando el día se hizo noche por encanto, cuando los sonidos son apariencias que flotan tenues, una frágil llovizna que cae mojando tu rostro en "Je T'Aime", 'embrujada silueta yo también te amo...'
'Las Momias de Palermo' son sirenas calmando el lago más negro. Hadas desafiando la inconciencia del caminante. Iremos más allá.
'Las Momias de Palermo' son sirenas calmando el lago más negro. Hadas desafiando la inconciencia del caminante. Iremos más allá.
Raúl Cabrera Hidalgo.
Valentina
scopitones, 2012
Estamos ante un clásico de la música indie. Algunos piensan que estos grupos surgieron por los 90s. Sin embargo, los ingleses The Wedding Present llevan ya una larga carrera a sus espaldas. Cabe destacar lo caótica de esta. Por ella han pasado infinidad de miembros y ha tenido varias etapas, eso sí, con su líder David Gedge siempre a la cabeza. Quizás por ello, para mi tenga más merito si cabe que sigan dando guerra y que, tras cuatro años de espera, vuelvan con un disco tan interesante como lo es Valentina. Sin duda, una vuelta a los orígenes más viscerales y no tan ’Light’ como su anterior álbum.
Si me pongo a repasar su discografía, me resulta difícil definirla en una palabra. He escuchado discos suyos como "Bizarro" (1989), pasando por "Watusi" (1994) o "El Rey" (2008). Obviamente, la evolución de la banda es más que notable, pero no sabría con qué etapa quedarme. Temas como "Boo Boo" o "Brassneck" me gustan tanto como "Mystery Date" de su último disco. Esta última me parece que tiene una estructura increíble. Al escucharla por primera, vez dejé que sonara una y otra vez durante un buen rato. Suelo ser bastante escéptico con las bandas que llevan rulando muchos años. Me he llevado más de un chasco al ver esa especie de decadencia que suele rodear a estos grupos. Sin embargo, "Valentina" ha logrado que preste atención a los diez nuevos temas que nos presentan.
El disco empieza con la canción "You´re Dead". Es una de esas melodías que van in crescendo, pasando de un ritmo tranquilo a guitarreos sin romper el ambiente. El resto del disco sigue esa dinámica cañera indie-rock que personalmente me encanta. "You Jane", "Stop Thief", "Deer Caught In The Headlights" o "Meet Cute" siguen ese estilo potente y estruendoso que tanto me gusta. He crecido escuchando bandas de rock de los 70, y esa es la razón por la que siempre me tiren los guitarreos y los ritmos cañeros. Eso no quiere decir que no valore y aprecie esas canciones lentas instrumentales y melódicas, como puede ser la antes mencionada "Mystery Date". Lo bueno de este tipo de bandas es esa combinación en sus canciones. Lo mismo empiezan con algo pausado y lo finalizan con una explosión de sonido como todo lo contrario. Me recuerdan a infinidad de bandas inglesas de más o menos su quinta que siguen esta misma dinámica. Me vienen a la cabeza, por ejemplo, los míticos The Cure o Morrissey.
En definitiva, un disco que para mi sabe a reencuentro con lo que un día fue The Wedding Present. Podría ponerme tiquismiquis sacando fallos a este trabajo, pero realmente no me parece necesario y tampoco me apetece sonar pedante. Cuando un CD logra que le preste la atención suficiente como para escucharlo entero se merece todo mi respeto. En lo que vamos de año, no puedo decir que por el momento haya escuchado discos que crea que vayan a estar en el TOP TEN del 2012. Me aventuro a decir que, si me toca en su día hacer esa lista, este álbum estará ahí a no ser que vayan saliendo joyas en estos meses. Escuchadlo si tenéis la oportunidad y si os gusta la música bien hecha.
Si me pongo a repasar su discografía, me resulta difícil definirla en una palabra. He escuchado discos suyos como "Bizarro" (1989), pasando por "Watusi" (1994) o "El Rey" (2008). Obviamente, la evolución de la banda es más que notable, pero no sabría con qué etapa quedarme. Temas como "Boo Boo" o "Brassneck" me gustan tanto como "Mystery Date" de su último disco. Esta última me parece que tiene una estructura increíble. Al escucharla por primera, vez dejé que sonara una y otra vez durante un buen rato. Suelo ser bastante escéptico con las bandas que llevan rulando muchos años. Me he llevado más de un chasco al ver esa especie de decadencia que suele rodear a estos grupos. Sin embargo, "Valentina" ha logrado que preste atención a los diez nuevos temas que nos presentan.
El disco empieza con la canción "You´re Dead". Es una de esas melodías que van in crescendo, pasando de un ritmo tranquilo a guitarreos sin romper el ambiente. El resto del disco sigue esa dinámica cañera indie-rock que personalmente me encanta. "You Jane", "Stop Thief", "Deer Caught In The Headlights" o "Meet Cute" siguen ese estilo potente y estruendoso que tanto me gusta. He crecido escuchando bandas de rock de los 70, y esa es la razón por la que siempre me tiren los guitarreos y los ritmos cañeros. Eso no quiere decir que no valore y aprecie esas canciones lentas instrumentales y melódicas, como puede ser la antes mencionada "Mystery Date". Lo bueno de este tipo de bandas es esa combinación en sus canciones. Lo mismo empiezan con algo pausado y lo finalizan con una explosión de sonido como todo lo contrario. Me recuerdan a infinidad de bandas inglesas de más o menos su quinta que siguen esta misma dinámica. Me vienen a la cabeza, por ejemplo, los míticos The Cure o Morrissey.
En definitiva, un disco que para mi sabe a reencuentro con lo que un día fue The Wedding Present. Podría ponerme tiquismiquis sacando fallos a este trabajo, pero realmente no me parece necesario y tampoco me apetece sonar pedante. Cuando un CD logra que le preste la atención suficiente como para escucharlo entero se merece todo mi respeto. En lo que vamos de año, no puedo decir que por el momento haya escuchado discos que crea que vayan a estar en el TOP TEN del 2012. Me aventuro a decir que, si me toca en su día hacer esa lista, este álbum estará ahí a no ser que vayan saliendo joyas en estos meses. Escuchadlo si tenéis la oportunidad y si os gusta la música bien hecha.
por Iker Romero
desde crazyminds.es
This Train
la rose noire, 2011
¿Qué tienen en común David Lynch y Prince? Ambos poseen una sensibilidad especial para descubrir a mujeres fascinantes y un sello de marca inconfundible. En el caso del director de "Cabeza Borradora", además, nos encontramos con un "problema" añadido: las imágenes de sus filmes causan tal impacto en nuestras retinas que al oír ciertas melodías resulta inevitable recordarlas. Y de ahí ese calificativo de "lynchiano" que los críticos solemos utilizar -a veces- demasiado alegremente.
Por su nombre (al igual que la vapuleada Lana del Rey) y por su belleza turbadora, Chrysta Bell encaja perfectamente en el universo lynchiano. Durante los noventas, esta texana lideró el grupo de swing retro 8½ Souvenirs, hasta que en 1998 conoció a Lycnch. Sólo tenía 20 años, pero el realizador de Missoula la convirtió en su nueva musa. Volvieron a coincidir posteriormente -con un álbum, "Strange Darling", que no llegó a ver la luz, con Lynch como productor ejecutivo, y la colaboración de la cantante en el soundtrack de "Inland Empire" (2007)- hasta llegar a "This Train", un proyecto que ha tardado más de una década en materializarse. En esta nueva aventura, el autor de "Mulholland Drive" ha recurrido a dos de sus colaboradores habituales: John Neff, con quién compartió "Bluebob" (2001), y Dean Hurley, coautor del reciente "Crazy Clown Time" (2011).
A quienes están acostumbrados a los sonidos de las películas de Lynch, "This Train" les resultará familiar, especialmente en su tema titular, donde el traqueteo de un tren se funde con sintetizadores oníricos a lo "Twin Peaks", sobre los que vuela la voz sensual pero distante de Chrysta como si se pusiera en la piel de Ronette Pulaski, huyendo amnésica del vagón donde Laura Palmer fue asesinada. Igualmente sugerentes son los tumultuosos blues de ultratumba "Swing With Me" y "Real Love" (con guitarras que parcen tocadas por una güija invocando espíritus malignos), el morboso "Friday Night Fly", el inquietante "Bird Of Flames" (con Lynch repitiendo "funny games" como una psicofonía) y el atmosférico "Polish Poem" (incluido en "Inland Empire").
Los seguidores de David Lynch nos mordemos las uñas esperando una nueva película, pero mientras nos ofrezca majaradas musicales tan atractivas como esta, mantendrá nuestros instintos bajo control.
por Miquel Botella
desde rockdelux.com
Ghosts
monolake/imbalance computer music, 2012
Robert Henke es el culpable de que cada aparición discográfica de Monolake sea un salvaconducto hacia las tierras frias, grises, fisicas, de una electrónica mecánica, hambrienta de dub, alarma de imposible desconexión, jauria de silencio cercenando el bosque con metalicos glitchs que son aguacero de tempestades siempre imprevistas.
"Ghosts" es nieve que te enviste por todos los lados en un continuo enjambre de beats colocados de forma inteligente para que no podamos dormir durante un par de noches. Y eso que el tema que titula el CD nos engaña con su ritmica secuencia tecno. Pero el miedo lo encontramos en "Taku" o "Afterglow", verdaderos hits secuenciados, robots sin vida que piden una oportunidad para respirar, teclados absorventes, ambient sin sonrojo ni aburrimiento.
Y digo lo de ambient porque "Hitting The Surface" me parece de lo más interesante que he escuchado ultimamente con su mapa etéreo de ausencias sonoras que se ven abruptamente violentadas por pedazos de electrónica humanamente sideral.
Si quieres no bailar te pones "Discontinuity" y seras embriagado por una solemne cruzada de latidos que rebasan el orbe craneal con sus impulsos continuos, con su marcapasos insolente.
Robert Henke lo ha vuelto ha hacer. Se ha comido la pastilla de los viajes inciertos por planetas imaginados de industrias carbonizadas, de óxido en el alma, para hacernos visionar el estado de las cosas. Podredumbre, asco, hastío, lamentos, bombas atómicas de odio que estan por venir...
"Ghosts" es nieve que te enviste por todos los lados en un continuo enjambre de beats colocados de forma inteligente para que no podamos dormir durante un par de noches. Y eso que el tema que titula el CD nos engaña con su ritmica secuencia tecno. Pero el miedo lo encontramos en "Taku" o "Afterglow", verdaderos hits secuenciados, robots sin vida que piden una oportunidad para respirar, teclados absorventes, ambient sin sonrojo ni aburrimiento.
Y digo lo de ambient porque "Hitting The Surface" me parece de lo más interesante que he escuchado ultimamente con su mapa etéreo de ausencias sonoras que se ven abruptamente violentadas por pedazos de electrónica humanamente sideral.
Si quieres no bailar te pones "Discontinuity" y seras embriagado por una solemne cruzada de latidos que rebasan el orbe craneal con sus impulsos continuos, con su marcapasos insolente.
Robert Henke lo ha vuelto ha hacer. Se ha comido la pastilla de los viajes inciertos por planetas imaginados de industrias carbonizadas, de óxido en el alma, para hacernos visionar el estado de las cosas. Podredumbre, asco, hastío, lamentos, bombas atómicas de odio que estan por venir...
desde
Mature Themes
4AD, 2012
El pop es el género que “domina” la escena musical lo que le ha traído un constante desprestigio a nivel de calidad. Pero para cambiar este paradigma llega "Mature Themes" un disco pop que de “Pop” no tiene nada.
Ariel Pink esta de regreso y a pesar de diversos rumores de su separación del Haunted Graffiti, la banda que lo acompaña en esta etapa musical, vuelven todos juntos para mostrarnos de la excentricidad y la calidad no están peleados. "Mature Themes" es un álbum con diversos matices que tienen como base el pop pero durante todo el disco encontramos la característica muestra de experimentación que la excéntrica mente de Pink ya ha convertido en el sello de su trabajo.
La bienvenida del disco se basa en un pop retro muy melodioso que mantiene una voz plana y constante por parte de Ariel, "Kinski Assasin", "Mature Themes" y "Only In My Dreams" son la gran muestra de esto; haciéndonos pensar que probablemente la experimentación saturada que escuchábamos en su pasado trabajo ha desaparecido.
Al ir avanzando el álbum se empieza a tornar oscuro, más pesado y poco a poco empezamos a sentir como la experimentación de sonidos comienza a tomar el control, el eminente sello de Ariel Pink se hace presente con "Diftwood" y "Shnitzel Boogie".
La verdadera joya de este álbum llega al salir del ambiente oscuro ya que nos encontramos con un dream pop denso aderezado por los diversos y característicos tonos de la voz de Ariel Pink, "Symphony Of The Nymph" es la canción cumbre de este trabajo discográfico. Un tema con una batería simple, impregnada de sintetizadores agudos y ocasionales apariciones de guitarra; que forman la base para poder escuchar las diferentes “personalidades” de la voz de Ariel.
Para encaminarnos al final de "Mature Themes" el dream pop deja de ser denso y vuelve a ser melodioso pero ahora pegajoso, muy ochentero y plano, "Pink Smile" y "Live It Up" son ejemplo de esto. Creando un ambiente bastante relajado llegamos al final con un gran cover para "Baby", canción original de los hermanos Donnie & Joe Emerson de 1979; manteniendo la esencia pacífica de la canción pero inundándola de sonidos y ecos experimentales muy discretos hacen un gran final para despedir este álbum de tantos matices que nos hace pensar que probablemente nuestro concepto de música Pop no es la más adecuada.
por Priscilla
desde conceptoradial.com
El Sueño del Esquimal #367 se transmitirá el jueves 27 de Septiembre
a las 21:00 hrs. por Radio Placeres 87.7 FM desde la bahía de Valparaíso, también online
para el resto de este y los otros mundos, www.radioplaceres.cl.
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